El bloqueo a la zona arqueológico dejó pérdidas económicas que no han cuantificado
Trece días después que Chichén Iztá reabrió al público, se calcula que a la zona arqueológica han ingreso aproximadamente 200 mil visitantes, comentó José Arturo Chab Cárdenas, director del Centro INAH Yucatán.
El funcionario federal aseguró que “la simple manifestación”, a cargo de artesanos, guías de turistas y ejidatarios de San Felipe, Pisté y Xcalacoop, dejó pérdidas económicas que hoy día no se han podido cuantificar.
Durante la semana que los manifestantes bloquearon la carretera Mérida-Valladolid, unos 80 mil turistas dejaron de ingresar al sitio arqueológico por lo que causó perjuicio a los artesanos y demás prestadores de servicios.
«Nosotros tenemos un promedio de 75 mil a 80 mil visitantes que sufrieron un impacto porque no pudieron ingresar a la zona arqueológica», comentó Chab Cárdenas, quien fue entrevistado previo a los inicios de los trabajos preliminares del sistema de transporte Ie-Tram.
En otro tema, el INAH realizará una inversión histórica de 1,100 millones de pesos para atender a 10 zonas arqueológicas: Chichén Itzá, Uxmal, Oxkintok, Labná, Sayil, Xlapak, Chacmultún, Ek Balam, Kabah y Dzibilchaltún.
«El día de ayer (por el lunes) dimos el banderazo para la remodelación de la Unidad de Servicios de Chacmultún, que tenía 20 años sin recibir mantenimiento. La inversión es de $11 millones», comentó. «Ya dimos inicio a las construcciones de los centros de atención a visitantes de Dzibichaltún y Chichén Itzá. En las próximas semanas estaremos con 10 obras más, que durante los próximos 10 meses se realizarán en el Estado».