Se puede prevenir si un juez penal o de lo familiar dicta una orden de protección
Uno de los problemas de las mujeres, víctimas de la violencia de género, es que se ven obligadas a salir de sus casas para salvar su vida y las de sus hijos.
Al respecto, la consejera jurídica de Unasse, Amelia Ojeda Sosa, mencionó que la falta de un acompañamiento adecuado por parte de las autoridades al momento de brindar atención a las víctimas de violencia es lo que las obliga dejar su hogar.
“No hay un acompañamiento adecuado por parte de las organizaciones públicas que deben dar la atención a las víctimas de violencia. Si la mujer está en una situación de riesgo y no hay quién le dé el auxilio, la asesore, la acompañe para que se hagan esos trámites, por supuesto que al final saldrá huyendo ella o muchas es el consejo que le dan con tal de no trabajar y le recomienda: ‘Si tiene donde ir, que lo haga’”, explicó.
Esta situación puede prevenirse desde un principio, sí un juez de lo familiar o penal dicta una orden de protección sólo con que la fémina solicite el auxilio de la autoridad, aun cuando no se interponga la denuncia.
“Quien debería salirse sería el agresor. Eso puede lograrse con las órdenes de protección, que las puede dictar un juez penal, un juez de lo familiar o, dependiendo de la situación, el Ministerio Público. Se impone como condición que la mujer tenga que iniciar en poco tiempo una acción legal”, comentó.
A todas las mujeres víctimas de violencia, la abogada les recomendó, a no tener miedo de llamar a la policía, contar con redes de apoyos sociales y familiares y no sentir vergüenza por externar la situación por la que viven.
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