



Ante una alarmante realidad que afecta a miles de mujeres y personas gestantes en Yucatán, el coordinador de la Fracción Legislativa del PRI en el Congreso del Estado, Gaspar Quintal Parra, hizo un llamado enérgico para atender con urgencia la violencia obstétrica que se vive en el sistema de salud yucateco.
Durante la presentación de una iniciativa de reforma para garantizar una atención digna, respetuosa y segura durante el embarazo, parto y puerperio, el legislador expuso que más de 53 mil mujeres y personas gestantes fueron víctimas de violencia obstétrica en los últimos cinco años en Yucatán.
“No podemos seguir permitiendo que uno de los momentos más importantes de la vida familiar esté marcado por la violencia o el trauma. Es urgente transformar la atención obstétrica en Yucatán”, subrayó Quintal.
Yucatán entre los primeros lugares en violencia obstétrica
Gaspar Quintal detalló que el 37.1% de las mujeres y personas gestantes que dieron a luz entre 2016 y 2021 reportaron haber sido víctimas de violencia obstétrica, lo que coloca a Yucatán entre los estados con mayor prevalencia de este problema a nivel nacional.
Aunado a ello, en el año 2021 se registraron 15 muertes maternas en la entidad, alcanzando la segunda tasa más alta del país, con 81.4 fallecimientos por cada 100 mil nacimientos.
El legislador priista lamentó que aún prevalezcan prácticas discriminatorias, tratos deshumanizados y negligencias médicas, sobre todo hacia mujeres indígenas, afrodescendientes, rurales y en situación de pobreza.
“Se trata de una violencia estructural que debe erradicarse. Las mujeres y personas gestantes tienen derecho a recibir atención médica técnicamente adecuada, pero también humana, respetuosa y libre de discriminación”, enfatizó.
Tratamientos sin consentimiento y maltrato físico
Citó datos de la organización GIRE, que revelan que el 33% de quienes sufrieron violencia obstétrica durante cesáreas fueron sometidas a procedimientos médicos sin consentimiento, y un 27% padeció maltrato psicológico o físico.
Frente a este panorama, Gaspar Quintal propuso la reforma para la Atención Digna, Respetuosa y Segura del Embarazo, Parto y Puerperio, que busca garantizar el derecho a una atención integral desde un enfoque de derechos humanos, perspectiva de género, interculturalidad y pertinencia lingüística.
“Las mujeres y personas gestantes deben tener información clara, acompañamiento durante el parto, respeto en todo momento y servicios médicos de calidad. Frenar la violencia obstétrica es una deuda de justicia y humanidad”, concluyó.