




A través del programa de entrega de aparatos funcionales, el Sistema DIF Yucatán ha mejorado la calidad de vida de más de 2,100 personas con discapacidad en todo el estado, reafirmando su compromiso con la inclusión, la autonomía y el bienestar de quienes más lo necesitan.
Uno de estos rostros es el de Moises Misael Cen Núñez, joven vallisoletano de 25 años que vive con mielocele e hidrocefalia, condiciones que le provocan paraplejia desde su nacimiento. A pesar de ello, su historia es una de determinación, amor fraterno y esperanza.
Gracias al apoyo del DIF Yucatán, Moises recibió una nueva silla de ruedas, lo que le ha permitido recuperar movilidad y seguridad en sus traslados. Acompañado por su hermano Santiago, quien ha sido su guía, apoyo y motor constante, hoy recorre las calles de Valladolid con más libertad, demostrando que el acompañamiento familiar, la voluntad y las herramientas adecuadas pueden abrir caminos impensables.
“Este tipo de apoyo no solo facilita el movimiento físico. También fortalece la independencia, eleva la autoestima y estimula la participación activa en la comunidad”, destacan las autoridades del DIF.
Un compromiso firme por la inclusión
El Gobierno del Estado de Yucatán, a través del DIF estatal, ha fortalecido este programa con una estrategia sólida, encabezada por el Gobernador Joaquín Díaz Mena y con la visión solidaria de la Presidenta Honoraria del DIF Yucatán, Mtra. Wendy Méndez Naal.
En lo que va del año, se han entregado 2,126 aparatos funcionales en toda la entidad, incluyendo sillas de ruedas, andaderas, bastones de cuatro puntos, bastones blancos y muletas, en beneficio de niñas, niños, adolescentes, personas adultas y adultos mayores con alguna discapacidad, ya sea temporal o permanente.
Del total de apoyos entregados, 950 fueron posibles gracias a la colaboración con la Beneficencia Pública Estatal, ampliando el alcance de esta iniciativa a comunidades de todo el territorio yucateco.
Inclusión y autonomía como ejes
La Mtra. Wendy Méndez Naal resaltó que estas acciones son más que una ayuda material; son herramientas de dignidad y empoderamiento:
“La entrega de estos aparatos mejora la calidad de vida, fomenta la autonomía e inclusión social y demuestra que, con voluntad y trabajo coordinado, se puede transformar la realidad de muchas personas”.
La funcionaria subrayó también que este programa es resultado de un esfuerzo colectivo entre instituciones y responde a un compromiso ético con los sectores más vulnerables del estado.
Con estas acciones, el DIF Yucatán se consolida como un puente de transformación y esperanza, construyendo un estado más justo, accesible e incluyente, donde todas y todos tengan oportunidades reales para salir adelante.