El director del Centro de Integración Juvenil, Víctor Roa Muñoz, dio a conocer que hasta la fecha son quince personas las que fueron atendidas en este lugar que llegaron con síntomas propios del “síndrome de abstinencia”, ya que debido a las medidas de resguardo domiciliario y restricciones sanitarias para prevenir los contagios de Covid-19, se suspendió la venta de bebidas alcohólicas:
“Hemos tenido atención a unos pacientes que han presentad un cuadro pero no de gravedad, afortunadamente se les da el apoyo médico y psicológico, tanto de manera presencial como a distancia a través de las redes sociales e internet estamos ofreciendo también la contención y el apoyo psicológico”.
Al respecto, el director del CIJ, Victor Roa Muñoz, comentó que esta medida ha impactado a muchas personas que dependían en gran medida del consumo de alcohol y quienes han manifestado la intención de recibir ayuda para superar la crisis de la ansiedad por la que atraviesan ante la falta de esta sustancia, sin embargo, ha disminuido, pero hay que tomar en cuenta el resguardo en que se encuentran las personas ante el covid-19 que no les permite salir: “Han sido pocos, a lo mejor unos 10 ó 15 casos de los que están asistiendo, pocos en comparación con el número que teníamos antes de la contingencia sanitaria”.
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